Durante 11 años (desde marzo de 1995, cuando comienzan las protestas), la Asociación de amigos de Vicente Aleixandre ha conducido enérgicos trabajos para impedir la destrucción de la vivienda donde quiso arraigarse el escritor. El pasado 23 de mayo, sin embargo, la --así llamada-- Comunidad de Madrid, más el Ayuntamiento de la misma ciudad --regido en estos momentos por el criminal Partido Popular--, con la venia del Ministerio de Cultura del Partido Socialista Obrero (que nada tiene de socialista, y mucho menos de obrero), decidieron dar carpetazo al asunto, poniendo a la venta la casa.
De manera que habrá que reunirse para salvar la casa del poeta. Aún más, dicen los defensores de ella: ésta es "la casa de la poesía". Y sí, es la casa de la poesía. Uno de los mil centros del universo de la poesía. "Sobre el reino de Dios se extienden muchas mansiones". Cierto es que a la poesía, como a Dios, no se le encuentra exclusivamente en el cielo, sino también en el infierno, en la miseria y en la catástrofe. Acontecimientos infaustos han servido en muchas ocasiones para sacar a la luz lo mejor de las personas, y la amenaza que pende sobre la memoria de Aleixandre llamará a los descontentos y a los inconformes a reunirse y a manifestarse públicamente en contra de la estúpida resolución de las frías autoridades españolas.
Se llama, pues, a estos descontentos, a que, dentro de dos días, el próximo viernes 29 de junio, a las 6 de la tarde, se junten en la Puerta del Sol, frente a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, para protestar por el nulo interés que los encargados de la cultura sienten en verdad por ésta.
El siguiente mes habrá que juntarse nuevamente: el jueves 12 de julio, a las 8 de la noche, se celebrará en el Ateneo de Madrid (calle del Prado, número 21) otra protesta, para que la ciudad no pierda sus emblemas, esos lugares que los indiferentes quieren hacer desaparecer, como el Teatro Albéniz y el pabellón de enseñanza Bernardo Ginerre.
Pregunta Jaume d'Urgell en Kaos en la red: "¿Vamos a permitir que la especulación inmobiliaria destruya los pocos espacios que quedan para la cultura de base? No permitamos que los intereses de unos cuantos acaben con el legítimo derecho de todos a gozar de nuestro patrimonio cultural colectivo".
Más información sobre las protestas, en este enlace de Kaos en la red; una cronología de la iniciativa de recuperación de la casa de Aleixandre, en este enlace del Observatorio del Patrimonio Histórico Español, sitio donde obtuve las fotografías.
El poeta se acuerda de su vida
Perdonadme: he dormido.
Y dormir no es vivir. Paz a los hombres.
Vivir no es suspirar o presentir palabras que aún nos vivan.
¿Vivir en ellas? Las palabras mueren.
Bellas son al sonar, mas nunca duran.
Así esta noche clara. Ayer cuando la aurora
o cuando el día cumplido estira el rayo
final, ya en tu rostro acaso.
Con tu pincel de luz cierra tus ojos.
Duerme.
La noche es larga, pero ya ha pasado.
(Poemas de la consumación, 1968)
miércoles, junio 27, 2007
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